Viavelez, antiguo puerto de la costa cantábrica donde se tejieron vidas de marinos, de carpinteros de ribera, de pescadores y emigrantes. Lugar de “arribada”, escondido entre acantilados de la rasa costera del occidente asturiano. En su día, emporio de la construcción de barcos de vela.

Esta es la historia de sus casas y las gentes que las habitaron. “No se trata del orgullo del origen, orgullo siempre un poco sospechoso. Se trata de no renegar de nada que haya sido vivido" (Elias Canetti en "Juego de ojos) 

Pretendemos conservar la memoria, la nuestra y la de aquellos que nos sigan, que nos ayude a saber de dónde venimos, quiénes somos y quiénes fuimos.

Recogemos, fundamentalmente, las casas que había en Viavelez en torno a los años 50-60 del siglo XX, con sus apodos. Unas con apodos muy claros y mantenidos en el tiempo. Otras construidas a finales del XX y principios del XXI, aún no han vivido lo bastante y deberán esperar a ganarse un nombre.

Queremos destacar que EL APODO es un signo de identidad personal, familiar y local. Nos permite descubrir a la familia y sus parentescos. No conoce de clases sociales y, salvo raras excepciones, nos es impuesto con mayor o menor fortuna; es patrimonio de la colectividad. Estamos firmemente convencidos de que lo despectivo y negativo no está en la palabra en sí (el mote), sino en el tono de la persona que lo pronuncia.

Va dedicada a todos aquellos que algún día aquí estuvieron, pero que se fueron, a los que no estaban pero vinieron, a los de dentro y a los de “fora”, todos uno en el amor a este pueblo, a esta tierra, a su historia y a sus gentes.